Aprender a liar un porro será una de tus primeras pruebas como novato en la comunidad cannábica. Sin embargo, hay otra habilidad crucial que todo entusiasta del cannabis debe dominar y es aprender cómo apagar un porro para usarlo después. Pero primero, veremos qué le sucede a tu porro cuando lo enciendes y por qué eso es importante cuando lo guardas para más adelante.

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¿Qué le sucede a la marihuana cuando se enciende?

Cuando enciendes tu porro recién liado, provocas una reacción química. A medida que tu porro arde, el calor producido convierte los cannabinoides presentes en compuestos activos en un proceso conocido como descarboxilación.

Sin este proceso, los cannabinoides permanecen en forma ácida y pueden ser ineficaces.

Otro compuesto a tener en cuenta a la hora de encender tu porro son los terpenos que hay en él. El perfil de terpenos le da al porro su olor y sabor únicos. Cuando lo enciendes, el calor puede vaporizar o destruir este compuesto.

Por eso, cuando apagas un porro para usarlo más tarde, puedes notar algunas diferencias cuando lo vuelves a encender.

Cómo apagar un porro para usarlo después

Al apagar tu porro, puedes destruirlo fácilmente y perderás tu preciada hierba. No obstante, hay varias formas que puedes usar para apagar un porro para su uso posterior:

Deja que se apague solo

Aunque no es popular, dejar un porro en un cenicero hasta que se apague es una de las formas más fáciles de apagarlo. Sin embargo, esta podría no ser la mejor manera de apagar un porro, ya que seguirá ardiendo un poco. Si bien no quemará mucho, algunos lo consideran un desperdicio de una calada valiosa.

Debes tener mucho cuidado al usar este método para apagar un porro. Deja siempre el porro humeante en recipientes y ceniceros resistentes al calor.

Presiónalo

Presionar el porro es una forma común de aprender a apagar un porro para volver a usarlo. Esta técnica es familiar para los fumadores de cigarrillos: presionarlo contra una superficie plana y dura hasta que deje de arder.

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Sin embargo, puedes destruir fácilmente tu porro si usas demasiada fuerza para apagarlo. A diferencia de los cigarrillos, los porros tienen un papel más delgado que puede romperse fácilmente, arruinando su forma. En su lugar, trata de ser lo más delicado posible cuando apagues tu porro.

Frótalo

Esta es una versión delicada del ejemplo anterior. Consiste en colocar horizontalmente el porro en un cenicero y frotar suavemente el extremo encendido de derecha a izquierda. La parte en llamas se rompe y se separa del resto del porro.

El hecho de que estés usando menos esfuerzo para apagar un porro reduce las posibilidades de destruirlo. También es muy simple, por lo que es ideal para fumadores de cannabis novatos.

Sumérgelo

Como su nombre lo indica, sumergir el porro involucra agua. Así es. Colocas el extremo ardiente de tu porro en una pequeña cantidad de agua. ¿No tienes agua lista? En su lugar, usa una pequeña cantidad de saliva para apagar el porro.

La principal ventaja de este método es que es más seguro. Otros métodos, como el apagado automático, pueden provocar incendios accidentales si no se tiene el cuidado suficiente.

Por otro lado, si humedeces demasiado el porro, es posible que no vuelva a encenderse y se desperdicie.

Córtalo

Se trata de cortar el extremo quemado con un par de tijeras o un cuchillo afilado. Puedes sostener el porro con una mano y cortar con la otra. O colócalo en un cenicero y corta la parte encendida del resto del porro.

Sin embargo, asegúrate de que esté completamente apagado antes de desecharlo.

Fuente: Youtube (Cómo apagar un porro en 10 segundos)

Cómo guardar un porro para más tarde

Ahora que has aprendido a apagar un porro, es hora de saber cómo guardar tus doobies a medio fumar para usarlos después. De lo contrario, corres el riesgo de arruinar tu porro antes de tu segunda o tercera sesión.

La mejor forma de guardar tu porro para más tarde es guardarlo correctamente. Aquí hay formas de almacenar los porros a medio fumar, asegurándote de que mantengan su aroma, frescura y potencia.

Envases de vidrio

Un envase de cristal con cierre hermético es perfecto para guardar tus porros a medio fumar. También son inertes. Por lo tanto, no reaccionarán con tus porros, lo que podría destruir su perfil de terpenos.

Sin embargo, tus porros pueden volverse secos o quebradizos, especialmente cuando usas vidrio transparente. Un frasco de vidrio oscuro y opaco protegerá tus porros de la luz solar o del daño por calor. Además, puedes guardar el tarro de cristal en un armario lejos de fuentes de calor residual.

No obstante, es importante comprar frascos de vidrio diseñados para almacenar marihuana.

Doob tube

Este es otro método de almacenamiento que puedes usar para mantener tus porros frescos. Son recipientes herméticos diseñados para almacenar porros.

Una de las principales ventajas de un doob tube es que puedes llevarlo contigo. Por lo tanto, colocarte mientras estás en movimiento será más fácil.

Acerca de almacenar la hierba en una bolsa de plástico

Si bien puede sonar como una buena opción, debes evitar usar bolsas de plástico y frascos de metal para almacenar tus porros a medio fumar. Para empezar, no son herméticos y la exposición al oxígeno puede destruirlos.

Otra razón es que algunas bolsas de plástico pueden contener compuestos tóxicos, lo que puede provocar complicaciones de salud. Los frascos de metal, por otro lado, pueden afectar el sabor.

Nuestras conclusiones…

Como se ha comentado, existen cinco técnicas comunes sobre cómo apagar correctamente un porro. Incluyen presionar, sumergir, cortar, frotar y dejar que se apague de forma natural. El método que elijas dependerá de la facilidad y de tus preferencias.

Una vez que hayas apagado tu porro, busca la mejor forma de almacenarlo para garantizar su frescura, potencia y aroma. Más allá de eso, ahora podrás saborear tus porros sabiendo que no se ha desperdiciado nada de nada.

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